Fotografía: Instagram.com/india_martinez_oficial
Hace un tiempo la cantante Cordobesa India Martínez estreno su single ‘La gitana’ el cual ha estado pululando por casi todas las radios nacionales, como es de esperar, en una artista de este calibre.
Jennifer Jéssica Martínez, se crio en el barrio Cordobés de las Palmeras, un barrio de gente trabajadora y humilde desgraciadamente con mucha exclusión social y marginado por muchos cordobeses y cordobesas. Y es que si, en este barrio hay un gran número de familias gitanas, y todavía hoy los gitanos producimos rechazo, más aún si a ello se le une una situación de pobreza.
India sin duda es una artista increíble con una voz prodigiosa, si lo que hace es flamenco o no, es indiferente, desde luego desde mi punto de vista como cantaor y aficionado al flamenco su música se ajusta más al pop pero tiene una base flamenca importante porque como decimos nosotros “chanela” de cante y eso se refleja en su música aunque cante pop.
Pero el tema que sin duda ha generado polémica entre la comunidad gitana, no es su música en sí, ni su forma de cantar (Por la cual ha gozado siempre de sentirse bien acogida), sino por la letra de esta última canción ‘La gitana’ que resulta dar una visión trasnochada y estereotipada de la etnia gitana, particularmente en el sector femenino.
Y es que la letra tiene tiene telita… el estribillo enuncia así:
Vamos a hacerlo por las buenas
O mejor no hagamos nada
Ay, mira niño no me des más guerra
Tú no me conoces por las malas
Vamos a hacerlo por las buenas
O mejor no hagamos nada
Que si la sangre se me envenena
Me sale la gitana
La letra, en toda regla, es una amenaza, dejando claro que, si deja salir a la gitana que lleva dentro, podemos echarnos a temblar.
Basta ya de visibilizar al gitano como alguien peligroso, como alguien trapacero (como decía el dichoso diccionario de la RAE), como alguien, en definitiva, con quien hay que andarse con cuidado»
a verdad es que la letra habla por sí sola, pero solo en un país como España en el cual se sigue discriminando deliberadamente al pueblo gitano es posible que una canción como esta se sitúe entre los éxitos mas escuchados de la radio. No hace mucho tiempo pude escuchar una locutora radiofónica presentando la canción, enunciando con total naturalidad que “todos tenemos esos momentos de enfado en el que nos sale la gitana”. Me parece repugnante.
Desconozco si India Martínez tiene o no ascendencia gitana, pero lo que esta claro es que si lo que pretendía era visibilizar al pueblo gitano y su barrio Las Palmeras, lo ha hecho de la peor forma posible.
Basta ya de visibilizar al gitano como alguien peligroso, como alguien trapacero (como decía el dichoso diccionario de la RAE), como alguien, en definitiva, con quien hay que andarse con cuidado.
La música es una herramienta que puede cambiar el mundo y una canción puede servir como catalizador para la sensibilización, pero si se usa de manera errónea el resultado puede ser nefasto.
Esperemos que esta artista abandone el imaginario romaní de su creación artística en próximos trabajos porque ya hemos comprobado que no ha sabido darle el enfoque correcto.
Medio: Otro Periodismo
Fran Reifs, Cantaor flamenco
Fuente: otroperiodismo.com